Hogares Claret censó 63 niños de la calle

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“Las zonas que más presentan la problemática son la canalización de Patio Bonito, el Parque Lleras y El Poblado y la cancha de fútbol del barrio Manila” explica César Zapata, psicólogo de Hogares Claret.

Más aún, se debe destacar que los menores de edad llegan de otros sitios de la ciudad. En ese sentido, el 69% proviene del sector nororiental en barrios como Manrique, el Popular y Carpinelo. El 19% se desplaza desde la comuna centro oriental.

Frentes de trabajo

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El Sistema de Atención Integral trabaja en tres aspectos para favorecer a la niñez desamparada:

1. La unidad móvil “Vamos para mi casita” cuenta con un equipo permanente de trabajo compuesto por una trabajadora social, un enfermero, un deportólogo y un educador de calle. Ellos recorren los barrios en busca de los menores, con el objetivo de brindarles atención básica. Es habitual que los niños no se encuentren solos y que siempre permanezcan en grupo. Primero se les sensibiliza para que abandonen la calle y sean atendidos en el centro de acogida de la Secretaría de Bienestar Social. Si no aceptan esta invitación, entonces son exhortados a respetar el espacio público que habitan.

2. La meta final de la unidad móvil es el acceso de los menores a instituciones especializadas como Ciudad Don Bosco, Bosconia y el Centro de Acogida. En estos lugares les garantizan educación, alimentación, aseo, recreación y les imparten clases de artes y oficios.

3. Son motivados para que sigan un proceso de desaprendizaje de conductas. Con la intención de desligarlos del mundo de la calle y así rehabilitarlos de conductas nocivas como el robo, el consumo de alucinógenos y sacol y buscar la posibilidad de abandonar elhábito de dormir en las aceras. También hacen un fortalecimiento de redes, con la participación de antropólogos, comunicadores y psicólogos que identifican a la familia del menor e intentan que este se vinculen de nuevo a su núcleo familiar.

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No dar limosnas

Desde el 31 de agosto, La Unidad de Niñez de la Secretaría de Bienestar Social inició la campaña “Solidaridad responsable, no más niñas y niños explotados en las calles”, que tiene el objetivo de desmotivar la entrega de limosnas a los niños de la calle. Esta sensibilización sedesarrolla gracias a una campaña publicitaria en la que participan vallas ubicadas en sitios estratégicos de la ciudad y también contempla la entrega de volantes y calcomanías a los estratos 4, 5 y 6. Por ejemplo, para llegar de una manera más oportuna a la ciudadanía, imprimieron información de la campaña en 90 mil facturas de servicios públicos. Inclusive, niños atendidos en los centros de acogida repartieron volantes en el Parque Lleras y en los semáforos de El Poblado.

Por otro lado, la campaña creó la línea telefónica 444 83 33, donde las personas solidarias pueden establecer contactos para posibles donaciones; también hay una página web que hasta la fecha ha sido visitada por 7.763 cibernautas.

El trabajo de la Comisaría de Familia

“De jueves a sábado, venimos desarrollando operativos con estos jóvenes, en los que intentamos involucrar a sus familias” sostiene Marcela Duque, Comisaria de Familia 14. A los niños los conducen al Cerca y allí los entrevistan. Interrogan los motivos por los que habitan en la calle y contactan a los padres para que se encarguen de ellos. Estos deben firmar un acta de compromiso. Pero no faltan los casos en los que los niños no son reclamados por sus padres. Cuando ocurre esta situación, los niños son llevados al Centro de Emergencias 1 para niños entre los 0 y 7 años y al Centro de Emergencia 2 donde reciben entre los 7 y 18 años.“Nosotros debemos identificar los niños trabajadores de los niños que viven en el espacio público, para evitar molestias entre ellos” concluye la Comisaria.

 
 
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